Cuando vives un intercambio cultural en el extranjero es inevitable vivir cultural shocks o choques culturales. En este Artículo te contamos qué son, que sentimientos te pueden producir y cómo superarlos o gestionarlos.
Qué es un cultural shock
Un choque cultural ocurre cuando una persona se encuentra inmersa en una cultura diferente a la suya y experimenta diferencias significativas. Estas diferencias pueden darse en relación a costumbres, tradiciones, valores y comportamientos. Este fenómeno puede ser tanto emocionante como desafiante. Esto se debe a que implica adaptarse a nuevas costumbres en tu día a día.
Es importante destacar que el choque cultural no tiene por qué ser siempre negativo. De hecho, puede ser una experiencia muy enriquecedora. A medida que se van viviendo estos choques, se adquiere una mayor comprensión de la cultura y se desarrolla una mayor capacidad de empatía y tolerancia.
Algunos ejemplos de choques culturales son:
- En Estados Unidos siempre te ofrecen agua gratis en los restaurantes.
- En Irlanda las familias cenan muy temprano.
- En Francia todo el mundo se trata de usted.
- En Alemania la puntualidad es imprescindible en todas las ocasiones.
- En Australia la gente va descalza por la calle en los lugares de costa.
Qué puede hacer un cultural shock
Durante el choque cultural es común que se experimenten sentimientos de confusión, ansiedad y frustración debido a la falta de familiaridad con las normas y las expectativas culturales. Esta confusión puede provocar sentir homesickness.
El homesickness es un sentimiento de nostalgia por el país de origen y puede verse provocada por estos cambios culturales bruscos. Al igual que los choques culturales, el homesickness es un sentimiento completamente normal y comprensible. Al vivir en un nuevo país con una cultura diferente es normal que situaciones que antes eran cotidianas, ahora se vuelvan difíciles. Sin embargo, es importante saber cómo gestionar estos cambios culturales para que el homesickness no se prolongue en el tiempo. Si esto pasa, el intercambio cultural no se vivirá con ilusión.
Cómo gestionar los cultural shocks
Para gestionar los choques culturales de manera efectiva y evitar que el homesickness fastidie tu experiencia en el extranjero es esencial:
- Mantener una mente abierta: conoce las costumbres y ten siempre presente que habrá diferencias con tu cultura. Estas diferencias no tienen que ser malas, ¡disfruta de la diversidad cultural!
- Aprende y adáptate: investiga y aprende sobre la cultura, así te será más fácil comprender a las personas y evitar malentendidos
Es inevitable que como au pair, estudiante de intercambio, intern o monitor, vivas choques culturales. Así que, como ya hemos comentado, intenta mantener una mente abierta. Si no sabes gestionarlo, recuerda que nosotros siempre estamos aquí para ti en cada paso del camino.