Los primeros días en Estados Unidos son cruciales. Por eso os queremos dar un par de consejos para que la adaptación sea lo más fácil y rápida posible.
Bienvenido a tu nuevo hogar
Probablemente, tu familia anfitriona es muy diferente a tu familia. ¡Esto no es malo! Al contrario, es una gran oportunidad para conocer un nuevo estilo de vida.
Para sentirte como en casa lo antes posible, lo más recomendable es hacer planes con la familia anfitriona. Siempre que puedas pasar tiempo con ellos, pregúntales dudas, qué reglas siguen en su hogar, ayúdales con las tareas de la casa, pídeles ayuda si la necesitas… En definitiva, cuanto más tiempo pases con ellos, antes los conocerás, antes te conocerán y antes forjaréis una relación cercana.
Además, al igual que en tu casa, sigue sus reglas, limpia tu cuarto, limpia la cocina y los platos cuando cocines, sé respetuoso, comprensivo, honesto y, sobre todo, comunicativo. ¡La comunicación es la clave!
Primer día de instituto
El primer día o primeras semanas de instituto son emocionantes e inquietantes a partes iguales. Tan pronto como llegues ahí, verás que es tal y como habías visto en las películas. ¡No tienes nada que temer! Contarás con School Counselor, que te ayudará siempre que lo necesites. Además, lo más seguro es que debas hacer una prueba para conocer cuál es tu nivel académico y, pedir el School’s Handbook para conocer cuáles son las reglas y políticas del instituto.
Nuestra recomendación es que vayas con mucho tiempo para conocer al School Counselor antes de que empiecen las clases, que llegues siempre puntual a las clases y que dejes la vergüenza en casa. Sabemos que hablar con gente de tu edad en un idioma que no es el tuyo es difícil, pero cuanto antes empieces a hablar, antes harás amigos y mejorarás tu nivel de inglés. Durante el proceso, no te frustres, todos comprenderán que no es tu primera lengua y que estás aprendiendo.
¿Qué pasa si echas de menos a tu familia?
A esta sensación de tristeza, soledad y nostalgia se le denomina Homsickness. Surge de los muchos choques culturales que se experimentan en un intercambio cultural, ¡y es totalmente normal sentirlo! Para evitarlo, lo mejor es que no estés constantemente en contacto con tu familia y amigos de España, comparando España y Estados Unidos, o que te encierres en tu habitación o en ti mismo.
Lo que puedes hacer es participar activamente en la familia, el instituto y en la comunidad, tomando la iniciativa para hacer actividades y conocer gente nueva. También, es muy buena idea mantener una comunicación continua con tu familia anfitriona, recordar por qué querías ser un estudiante de intercambio y disfrutar de todo lo nuevo que estás viviendo.
Nuestros consejos para sentirte como en casa lo antes posible
- Tener expectativas realistas y una mente abierta sobre la experiencia.
- Sé curioso y seguro de ti mismo. Pregunta, explora, ten una mente abierta y toma la iniciativa.
- Ten consideración y sentido común. Evita situaciones peligrosas y sé respetuoso con la gente siempre.
- Sé educado. Pide las cosas por favor y gracias, pregunta a la gente qué tal están, da los buenos días, ¡y siempre lleva una sonrisa!
- Sigue las normas que la familia te ha puesto y ayúdales con las tareas del hogar como harías en tu casa.
- Atiende a todas las clases, todos los días. Llega a tiempo y con los materiales necesarios. ¡Los americanos odian la impuntualidad!
- Aunque no entiendas todo o no sepas decir algo, inténtalo. La gente no te juzgará, al contrario, valorará tu esfuerzo.
- Disfruta con tu nueva familia, amigos y todo lo que esta experiencia te va a ofrecer.
Convertirse en estudiante de intercambio es toda una aventura. Una aventura que se debe de disfrutar desde el primer momento. Para ello esperamos que nuestros consejos te sirvan de ayuda y si tienes dudas, ¡no dudes en hablarnos!
